Yo soy
un forofo de la música. Y tanto, que el otro día les dije a mis padres que iba
a ser productor de música de mayor, a lo que me respondieron: “Bueno, tú
primero haz una carrera y luego ya veremos…” Pero es que lo que me gusta de
verdad es la música. Y me diréis que a mucha gente le gusta la música, pero
para mí es algo indispensable en el día a día. Es como una droga, es algo que me llega al oído de una forma fuera de lo estimulado, es una auténtica explosión de
sentimientos encerrados. Me parece increíble el ser sensibles a una sucesión de
sonidos.
Pero, a
mí no sólo me gusta escuchar música, sino que también tengo curiosidad por
saber quién es el autor de la canción que estoy escuchando, qué otras canciones
tiene, quiénes son los músicos, su productora, qué instrumentos tocan, si meten
cuerda, si meten vientos, cómo son sus directos, qué vida llevan, de donde
vienen, si son de buena familia, si son de la calle…
Todo
esto, al no ser propio de mucha gente, me hace un friki del tema. Y lo soy,
pero lo soy porque quiero serlo, porque me gusta serlo, porque disfruto
siéndolo, porque me lo paso bien. Y, por eso, ser friki no es algo malo. Hace
poco estuve en Bilbao e iba con una persona (joven pero no tanto) que es
biólogo, que se paraba continuamente por la calle a examinar las plantas que se encontraba, y realmente
le fascinaban, se divertía observando sus propiedades y peculiaridades. Como
podéis imaginar, a mí esto me parecía bastante raro. Sin embargo, me dijo un
amigo mío, “Debe ser flipante tener un hobby así. Te diviertes y eres feliz con
nada, viendo plantas. Da igual ser friki, si en el fondo todos somos frikis en
algo”
Y es
que así es; si al final todos somos frikis y, quien no lo es, lleva una vida
muy aburrida, no se divierte ni la mitad que los que están obsesionados con
algo. Está claro que hay aficiones más normales que otras, pero al final, si no
nos salimos fuera de lo normal, ¿con que nos divertimos?
En esta
vida, sin dejar de tener amigos y llevarse con mucha gente, hay que ser frikis.
Juan R.
No hay comentarios:
Publicar un comentario